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domingo, 10 de enero de 2016

En la muerte de Robert Spitzer

    El 25 de Diciembre de 2015 ha fallecido en Seattle (Washington, EEUU) el psiquiatra Robert Spitzer, que se distinguió en el desarrollo del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM en sus siglas en inglés).

   
  Desde 1966 trabajo en la modernización del DSM , al concentrarse en la cuantificación y análisis de síntomas y comportamientos. Uno de los primeros comportamientos revisados fue la homosexualidad, que en el DSM estaba considerada como una enfermedad mental. Spitzer consiguió, en 1973, alcanzar un compromiso para retirar la homosexualidad como enfermedad mental. 

    Fue el presidente del grupo de trabajo del DSM-III en 1980 y estuvo vinculado al DSM-IV en 2003 y al DSM -V en 2013. La Organización Mundial de la Salud aceptó el criterio del DSM en 1990, cuando la institución recabó apoyos suficientes para oponerse a las corrientes integristas de diferentes religiones que tienen poder en muchos países, encabezados por los ochenta países que aun penalizan la homosexualidad de alguna manera, que se oponían a despatologizar la homosexualidad.

    El activismo de la Comunidad lgtb ha considerado siempre que esa pionera rectificación fue decisiva para iniciar una gradual transformación en la percepción de la homosexualidad por parte de la sociedad. Pero siempre hay una de cal y otra de arena, en 2001 escribió un estudio que se llamó ¿pueden algunos gays y lesbianas cambiar su orientación sexual? Donde argumentaba que era posible que algunos individuos altamente motivados podrían cambiar su orientación sexual de homosexual a heterosexual. Spitzer indicó que había hecho doscientas entrevistas telefónicas en la que, los encuestados, afirmaban que sus respectivas orientaciones sexuales habían cambiado de homosexual a heterosexual. Spitzer dijo que comenzó su estudio como un excéptico, pero este estudio reveló que el sesenta y seis por ciento de los hombres y el cuarenta y cuatro por ciento de las mujeres  entrevistados habían llegado a lo que, él, llamó un buen funcionamiento heterosexual.

    La APA (American Psychiatric Association) emitió un desmentido oficial de este estudio y señaló que no había sido revisado por expertos y afirmando que no había evidencia científica publicada que apoyase la eficacia de la terapia reparativa como un tratamiento para cambiar la orientación sexual. En 2012 Spitzer rectificó y pidió disculpas y se retractó de su estudio, indicando que estaba de acuerdo con sus críticos.

    En cualquier caso, sin su contribución, hoy estaríamos hablando de otra realidad en la  percepción de la homosexualidad por parte de la Medicina y por ende de la Sociedad.

Sirva este articulo como un humilde homenaje.

Ángel García-Pascual
Voluntario de "Gay-Inform, Línea lesbos, Bi, Trans"


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